Cuando de verdad deje de creer en la magia empezó la realidad.
Y no es mala cosa la realidad sino mas sencilla y directa mas cruda.
Cuando deje de otorgarle poder a unas palabras, a una imagen o aun ser
en las altas instancias al que pedir que solucionara mi vida. Es entonces
cuando conocí al que crea mi mundo, al que hace posibles mis anhelos. A
ese que cada dia me cuida , me protege, se ocupa de mi y sin saberlo me
ha acompañado siempre y siempre esta ahí. Con su voz suave no me critica
ni me alaba me permite ser y comportarme sin intervenir. La realidad es
relativa depende de nuestra interpretación y esa interpretación esta cargada
de mitos y leyendas particulares ademas de otras tantas colectivas. Pero hay
internamente una voz que nunca filtra nada a través de esas interpretaciones.
Una voz a la que hay que estar muy atento para oír porque sin hablarnos nos
dice lo que realmente queremos o deseamos, que a veces no tiene nada que
ver con lo que conseguimos o creamos y otras si. Y esa creo yo es la locura de
la dualidad que nos hace percibirnos como separados o divididos cuando en la
realidad somos un solo ser educado y viviendo en un mundo que funciona en los
extremos e interpreta todo a través de la dualidad.


Tano